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El Reina Sofía pone en marcha un programa para facilitar la orientación y la accesibilidad de los usuarios en el hospital

Seis profesionales cicerones peinarán los distintos centros del complejo sanitario con el fin de satisfacer las demandas informativas y las dudas de los usuarios, así como también guiarles por las distintas áreas

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El Hospital Universitario Reina Sofía ha puesto en marcha esta semana una novedosa iniciativa denominada Proyecto Cicerone con la que se da respuesta a una de las principales demandas formuladas por los usuarios en las encuestas de satisfacción: facilitar información a pacientes, familiares y usuarios para despejar cualquier duda sobre el funcionamiento del centro y guiarles por las distintas instalaciones del complejo hospitalario.

Este proyecto, que recibe el nombre de cicerone en alusión a la persona que se dedica a enseñar y explicar las curiosidades de una localidad, edificio o lugar, permitirá que profesionales perfectamente identificados puedan resolver cualquier duda a los usuarios relacionadas con el funcionamiento del hospital y la ubicación de los distintos servicios que en él se ofrecen, entre otros asuntos.

El director gerente del Reina Sofía, José Luis Díaz Fernández, señaló que el Proyecto Cicerone, que depende directamente del área de Atención al Usuario, será “de gran utilidad para que el paciente se sienta cómodo, seguro y bien acogido durante su visita o estancia en las distintas dependencias del complejo hospitalario”.

El interés por recibir al usuario del Sistema Sanitario Público Andaluz en unas instalaciones acogedoras pertenecientes a un complejo hospitalario que está integrado por siete edificios de amplias dimensiones y donde la creación de nuevas áreas y reordenación de las existentes es constante justifica la puesta en marcha de esta original medida, explicó el doctor Díaz.
Por su parte, la responsable del programa, Ana Calvo, puntualizó que el equipo humano del Proyecto Cicerone se compone de seis personas que trabajarán repartidas por el Hospital General, el Materno Infantil, el Provincial y el Edificio de Consultas Externas, para extenderse hasta el Hospital Los Morales y el Centro Periférico de Especialidades de Avenida de América cuando el proyecto esté más avanzado.

Guiar a los pacientes

En cada centro hospitalario se ha instalado un mostrador dotado con un terminal de ordenador que permite resolver cualquier consulta planteada por los usuarios, como por ejemplo la localización de pacientes por habitaciones o la indicación del recorrido que ha de seguir hasta llegar a su destino. En cada mostrador habrá un profesional cicerone para atender a los usuarios y otro peinará las distintas áreas del centro hospitalario con el fin de “anticiparse a las necesidades del paciente o familiar, indicarle cómo llegar al lugar de destino e incluso acompañarle”.

Los cicerones del complejo hospitalario pertenecen a diferentes categorías profesionales (enfermería, auxiliares de administración y celadores), han sido seleccionados tras el diseño previo de un mapa de competencias específico y se les ha formado adecuadamente para la tarea que van a realizar.

El grupo lo forman Carmen Jordano, María José Gimbert, María José Villegas, Carmen Cañizares, Lucía López y Natividad Salido, que (en turno de mañana y vestidas de blanco con peto verde quirófano y ribetes amarillos) responderán amablemente a las cuestiones planteadas. Para el desarrollo de su trabajo las guías hospitalarias estarán en contacto permanente con las áreas de admisión, cita previa, gestoría del usuario y las trabajadores sociales del Reina Sofía, principalmente.

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