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El Reina Sofía adquiere un nuevo equipo de radiación ultravioleta para tratar enfermedades de la piel

Este sistema, conocido como PUVA local, se puso en funcionamiento hace un mes y ya ha permitido tratar a una quincena de pacientes mediante la radiación exclusiva de la zona corporal afectada

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El servicio de Dermatología del Hospital Universitario Reina Sofía cuenta con un nuevo equipo de PUVA local que, a través de la emisión de radiación ultravioleta de la banda A, permite tratar patologías de la piel que se hallan localizadas en áreas accesibles del cuerpo como las manos, los pies y la cara, principalmente.

El responsable de esta especialidad, José Carlos Moreno, señaló que el nuevo equipo, que entró en funcionamiento hace un mes y ya se ha aplicado a una quincena de pacientes, mejora la accesibilidad de los enfermos y su uso resulta muy cómodo al ser de reducidas dimensiones y facilitar la movilidad y su adaptación a las diferentes partes del cuerpo afectadas.

Este sistema se suma a otro de mayores dimensiones con el que se aplican tratamientos en el Reina Sofía desde hace tres años y está indicado para aquellos pacientes en los que la enfermedad se ha extendido a más de una tercera parte de la superficie corporal. Este primer equipo de PUVA consiste en una especie de cabina de amplias dimensiones en la que se introduce el paciente para recibir la radiación correspondiente.

El doctor Moreno explicó que el nuevo PUVA “sólo radia la zona afectada, por lo que se reducen los posibles efectos secundarios y además descarga de actividad el otro equipo, reservando éste último para el tratamiento de los enfermos con una amplia afectación”. Antes de recibir estos tratamientos, se aplica sobre la zona afectada del paciente una sustancia conocida como psoraleno que potencia la respuesta de la piel tras la radiación ultravioleta.

Las enfermedades que se pueden tratar con el aparato recientemente adquirido son la psoriasis (de tipo vulgar y pustulosa) localizada en palmas y plantas y también en uñas, el vitíligo acral, los eczemas crónicos que no responden a tratamientos convencionales y la dermatitis atópica (palmas y plantas).

El jefe de servicio de Dermatología del Reina Sofía explicó que en la actualidad, con el equipo de PUVA local, se aplican tratamientos a unos quince pacientes por semana y, cuando esté a pleno rendimiento, se incrementará hasta los 20 ó 30 pacientes. En este sentido, prosigue el doctor Moreno, “cada paciente recibe una media inicial de veinte sesiones, dos por semana, para abordar estas patologías”.

Finalmente, el dermatólogo indicó que las personas que se someten a tratamiento con PUVA deben evitar una exposición solar extra fuera del tratamiento, revisar la medicación que toman para que no se produzcan reacciones alérgicas y realizarse una analítica general si es la cara la zona corporal afectada.

 

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